Einstein tenía razón
Hace poco leí cómo explicaba Einstein su Teoría de la relatividad para los no iniciados. Decía que si pones la mano en un horno durante un segundo te parecerá una hora, pero que si pasas una tarde con una bella mujer te parecerán apenas unos minutos. Esta noche he estado con dos amigas a las que no veía hacía meses y que tardaré varios más en volver a ver. ¿Cuánto tiempo habremos estado juntos, 2 ó 3 horas? Pues no lo sé, pero nos lo hemos pasado tan bien que han valido como muchísimas más. Es increíble cómo gente con la que he pasado centenares de horas no ha sabido dejar en mí ni la décima parte de lo que estas amigas me han dejado en unos minutos. Mientras, mi vida sigue un camino de días absolutamente únicos en los que a menudo se repite "sólo puede ser hoy". Y creo que es una buena señal...
Madrid en modo mayor
El miércoles, como no tenía que ir al doctorado hasta las 15, decidí ir por la mañana a la Academia de Bellas Artes de San Fernando. Podría hacer otro post hablando de lo que vi y el estado en que se encuentra el Museo, pero no... Al salir, hacía un día increíble...
Así que decidí bajar dando un paseo el tiempo que pudiera por el centro de Madrid. Me reafirmo en la inhabitabilidad de esta ciudad, pero lo que nunca he negado es que el centro es bastante bonito. Hay edificios verdaderamente impresionantes, y no hablo sólo del Palacio Real...
Entonces llegué a una conclusión: una de las cosas que más me molestan de Madrid es el ruido. Hay centenares de pequeños o grandes ruidos molestísimos: coches que circulan normalmente, autobuses arrancando o acelerando, camiones, motos, gente que grita, portazos...
¿Por qué disfruté especialmente este paseo entonces? Pues porque llevaba mi mp3 puesto, con muchas canciones alegres, animadas, en modo mayor, que te da la agresividad necesaria para enfrentarte de tú a tú con rascacielos absurdos, el tipo de música que pide mi vida en estos instantes. Queda desterrado y prohibido el modo menor...
Axioma del joven doctorando
Cuando tu fin de semana comienza el miércoles a las cinco de la tarde y en la Universidad al fin te tratan como a una persona normal, estás deseando que suene el despertador el lunes para ir a clase y descansar...
